Natalia l Colombia
Bajos ingresos, mucha energía
Natalia, madre soltera y profesional, trabajaba como administradora de fincas mientras cursaba un máster en administración de empresas. Sin embargo, su salario «no reflejaba su nivel profesional», lo que le dificultaba cubrir necesidades básicas como el transporte para ir al trabajo, el alquiler, los servicios públicos, y la alimentación nutritiva para su hijo en crecimiento.
A pesar de dormir solo entre cinco y seis horas por noche, Natalia se las arreglaba para trabajar, asistir a clases, y cuidar de su hijo. Su principal desafío era proteger a su hijo de las dificultades que ella enfrentaba, para que pudiera disfrutar de la infancia alegre que tanto se esforzaba por brindarle.
«Vivir en un estado constante de escasez es muy duro. Por ejemplo, en cuanto a la comida, tienes que ser muy cuidadoso con lo que compras para ahorrar lo máximo posible. Nuestra alimentación era extremadamente limitada», comenta Natalia.
La pandemia, una bendición disfrazada
Durante las largas horas de confinamiento por la pandemia, Natalia descubrió la programación. Para su sorpresa, no solo se sintió fascinada por este nuevo mundo, sino que también demostró un gran talento. Con su energía desbordante, participó en varios hackathons y se embarcó en un intenso aprendizaje autodidacta.
En el transcurso de su investigación, Natalia se sintió intrigada por Unity, y mientras buscaba más información sobre la plataforma de juegos más grande del mundo, se encontró con un anuncio de Generation.
“Sentí que era mi respuesta”, dice. Soñaba con poder dedicarse a algo que realmente le apasionara, tener la posibilidad de trabajar desde casa para cuidar de su hijo, y mejorar su situación económica.
Una vida sin preocupaciones
Apenas tres meses después de graduarse, Natalia consiguió un trabajo como desarrolladora de front-end en World Office Colombia, aprovechando las habilidades que adquirió en Generation (incluyendo técnicas para mejorar su currículum y entrevistas), así como su experiencia previa en codificación.
Una de las mejores ventajas de su nuevo trabajo es la posibilidad de trabajar de forma remota, algo poco común en Bogotá. Esto le ahorra hasta cuatro horas diarias en desplazamientos, ganando así más tiempo para dedicar a su hijo.
Nos dijo: «Mi trabajo es increíble. Mi calidad de vida ha mejorado muchísimo. Ahora puedo mejorar la calidad de vida de mi hijo; por ejemplo, puedo pagarle el colegio y ofrecerle una mejor alimentación. Además, aún me queda dinero para ayudar económicamente a mis padres y a mi abuela.
Generation lo cambió todo. Transformó mi forma de pensar, cambió por completo mi perspectiva sobre lo que es posible, y me permitió soñar en grande y alcanzar esos sueños. Ha sido una bendición enorme.»